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| Museo Arqueológico de Estambul (Turquía) |
DES-ENCUENTRO
Voluntad contra
voluntad.
Un día se creyeron
unidos;
era mero espejismo.
Dos lados de una
misma moneda,
contrarios
inevitablemente
divididos.
Te deslumbró la noche:
el faro desatendiste.
Ya ni siquiera ves
que te perdiste.
Y aún te obstinas en
desafiar
a quien un día
quisiste.
Este encuentro que
tanto ansías
ha de salirte caro.
No esperes que tire
la toalla,
hermano.
No besaré la lona:
ante el becerro de
oro
no sé vivir postrado.
(S. G. I., Madrid, 29 de octubre de 2014)
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| Caín y Abel, Tintoretto |
Survivor, Burning heart
Una estupenda entrada.-
ResponderEliminarA ellos solamente les quedaba volver a su encuentro del pasado remoto que permanecía en su memoria. Si lo hubiesen logrado, dejarían de ser sombra en su memoria.
Pero el Desencuentro es algo habitual a nuestra condición humana, el liderazgo empieza con la voluntad, que es la única capacidad que, como seres humanos, tenemos para que nuestras acciones sean consecuentes con nuestras intenciones y para elegir nuestro comportamiento.
Como decía Menandro De Atenas _Quien tiene la voluntad tiene la fuerza.-
<Saludos.-
En efecto creo que rectitud, integridad y honestidad son los mejores antídotos contra el desencuentro. Porque en general éste se produce por falta de coherencia, que en último término no deja de significar sinceridad, por una o ambas partes implicadas. Besos.
ResponderEliminarlos desencuentros pueden ser una fatalidad o una necesidad
ResponderEliminarel que poetizas es necesario y hasta veo la reja con el rosal marchito...
saludos
En realidad, poca reja y pocas flores hay en el asunto, querido Omar. Necesario... No diría, más bien tristemente inevitable. Y definitivo, sobre todo definitivo. No obstante entiendo tu posición: cada lector es perfectamente libre de interpretar nuestros textos como desee. Probablemente tu lectura era mucho más romántica e infinitamente menos cruda que la realidad. De poder, sin duda me hubiese quedado con ella. Besos.
EliminarMuy buen poema para el que lo quiera entender. Besos.
ResponderEliminarEs curioso que lo digas, porque normalmente se da por aludido quien no debe y viceversa. Nunca dejan de sorprender las variadas interpretaciones que se realizan de nuestros textos. Lo que sin duda los enriquece. Besos.
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