CURVAS
Cuando contemplo una curva en el camino, incluso una aparentemente familiar, siempre me pregunto qué habrá al otro lado. Y no me puedo resistir a descubrirlo, una vez más. Porque lo que hay puede no ser lo que hubo ayer. Es más, muy probablemente… afortunadamente, no será lo que hubo ayer.
Puede que hoy no te lo parezca, pero mañana será, en efecto, otro día. Con todas las consecuencias. La percepción del tiempo es relativa: ahora es sólo ahora. Y creas tú lo que creas ahora, nunca es demasiado tarde para recuperar la fe. Hay siempre tiempo para zurcirse.
Gracias por haberme enhebrado el hilo cuando a mí se me cansaba la vista.
Reloj blando en el momento de su primera explosión, Salvador Dalí |