YO YA HABÍA PREVISTO MI SUERTE
Caían las hojas del calendario.
No quedaba tiempo para el rencor
ni lugar para el arrepentimiento.
Había aceptado mi suerte,
la de la babosa:
vivir sin concha
como un caracol huérfano,
bestia vagabunda de los caminos
privada de hogar y de consuelo;
dejar por única herencia
estelas sutiles de plata,
lenguaje en tinta incolora,
evanescente testamento.
Corría el otoño;
caían de las copas los sueños resecos.
Yo ya había previsto mi suerte:
no esperaba visita,
no llegaría el caballero.
Arropada por el bosque
plácidamente dormía en el regazo del sueño.
De repente,
en la estación imprevisible,
soplaron nuevos vientos.
Aún siguen volando las hojas:
pronto hará casi un año
que me despiertas con un beso.
(S. G. I. Madrid a 1 de noviembre de 2011)
Para escuchar a Evanescence interpretando Bring me to life