"Esta mujer… Pero si ya colgó hace algún tiempo esa canción de Pink". Lo sé, lo sé. En realidad tengo una memoria prodigiosa, aunque una buena parte del tiempo procuro ignorar prudentemente ese don envenenado; no torturarme más de lo estrictamente necesario. Volvemos a recuperarla sencillamente porque nos gusta mucho, y porque viene al caso. Además algunas cosas han de repetirse a menudo. El objetivo deja de ser entonces que el otro sepa, para convertirse más bien en que el otro sepa que nosotros deseamos hacerle saber para que no olvide. De nuevo es el motor de todo la voluntad y el deseo.
Ya en alguna ocasión os he hablado de los beneficios que reporta el inusual hábito de mirar hacia atrás mientras se avanza. Muy pocos caminantes lo ponen en práctica. Sin embargo si lo hacéis, descubriréis un paisaje nuevo, no pocas veces apenas reconocible. El desconcertante fenómeno resulta aún más turbador si sacáis fotos del mismo camino a la ida y a la vuelta… ¡¿He pasado yo realmente por aquí hace unos minutos o unas escasas horas?! ¡¿De verdad estaba yo aquí hace unos pocos años?! ¡¿Era ésa mi vida realmente?!...
Mirad hacia atrás mientras avanzáis; seréis compensados con gratas sorpresas y se os abrirá un mundo ilimitado, lleno de posibilidades. De todas las que queráis atrapar al vuelo con vuestro cazamariposas: con determinación pero también con extrema delicadeza.
Porque nunca puede ser demasiado tarde para enmendar y reinventarse, pero cuanto antes empecéis, mejor. Porque tiene que haber siempre otra vida posible, aunque nadie dispone de siete y ni siquiera un gato logra resucitar eternamente. Así que no desaprovechéis ésta.
Pink, Glitter in the air (actuación en directo durante la entrega de Premios Grammy 2010)