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DOS PINCELADAS SOBRE HERVÁS


(S. G. I., Madrid, 13 de octubre de 2011)

EL CAMINO, EL DE DENTRO Y EL DE FUERA, NO TIENE FIN: LO CONSTRUYEN LOS PROPIOS PIES.


Es éste un viaje a paisajes naturales, pero también a mis paisajes interiores: imposible delimitar lo que queda a cada lado de la ventana que es mi cámara. Es éste un viaje iniciático al interior de vosotros mismos que pasa por mirar, también, al exterior.

Abrimos una puerta a los caminos que recorren las montañas de Hervás. También, y muy especialmente, a los caminos que os recorren y que quizá nunca hayáis osado hollar. Nos esperan muchos lugares nuevos. Y cada unos de vosotros descubrirá, por su cuenta, otros paisajes interiores no menos hermosos, una tierra virgen: vuestro pequeño reino privado.

TORMENTA DE NIEVE SOBRE LA HEIDI A 23 DE DICIEMBRE. PARTE III



































































































































































































































4 comentarios:

  1. Excelente las fotos y muy bien documentadas.
    Un saludo

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  2. Muchas gracias, Ana. Era para verlo desde dentro. En mi vida había estado bajo copos tan grandes. Nevadita por encima y con los pies dentro del agua congelada de los arroyos. ¡Qué vivificante!
    Feliz año desde Hervás

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  3. Preciosas fotos. Me alegra encontrar gente que disfruta con lo mismo que yo. Has recogido muy bien el ambiente de una nevada en el bosque.

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  4. Muchas gracias, Elías. Era tan intenso y espectacular, tan emocionante, que probablemente también la cámara se dejó llevar. Parecerá absurdo, pero tengo la completa convicción de que ella tiene sensibilidad propia y mucho carácter. Normalmente nos impresionamos ante las mismas imágenes y solemos ver el mundo de un modo muy similar, pero otras veces ella fotografía las cosas de una forma totalmente diversa a como yo las estoy viendo en la presunta realidad. Si lo piensas bien es muy inquietante. Más que nada porque entonces la realidad cuál es, la que ve el ser humano, o la que ve la máquina (que se presupone objetiva, nunca mejor dicho). Porque si es la que ve la máquina, la deducción es lógica: nuestro mundo no existe. Señor, yo no debería contestar comentarios a estas horas: soy animal nocturno (no me preguntes cómo lo compatibilizo con subir a la montaña temprano…), pero normalmente de madrugada desvarío bastante.
    Saludos navideños desde Hervás

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