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DOS PINCELADAS SOBRE HERVÁS


(S. G. I., Madrid, 13 de octubre de 2011)

EL CAMINO, EL DE DENTRO Y EL DE FUERA, NO TIENE FIN: LO CONSTRUYEN LOS PROPIOS PIES.


Es éste un viaje a paisajes naturales, pero también a mis paisajes interiores: imposible delimitar lo que queda a cada lado de la ventana que es mi cámara. Es éste un viaje iniciático al interior de vosotros mismos que pasa por mirar, también, al exterior.

Abrimos una puerta a los caminos que recorren las montañas de Hervás. También, y muy especialmente, a los caminos que os recorren y que quizá nunca hayáis osado hollar. Nos esperan muchos lugares nuevos. Y cada unos de vosotros descubrirá, por su cuenta, otros paisajes interiores no menos hermosos, una tierra virgen: vuestro pequeño reino privado.

AÑO NUEVO, VIDA NUEVA

Salomé Guadalupe Ingelmo, Ángel Ganivet, Concurso Literario Internacional Ángel Ganivet, Concurso Literario Ángel Ganivet, Concurso Ángel Ganivet, Premio Ángel Ganivet, Certamen Ángel Ganivet
Alcornoque de la Fresneda (Aldeanueva del Camino)

Son, sin duda, tiempos para el ahorro. Y en esto, en rentabilizar al máximo, los escritores somos expertos. Por eso yo sigo rescatando escombros de la basura, de esa que tiré en un pasado ya lejano. No para aferrarme a ellos con insensata y mortífera añoranza, sino para reciclar y fabricarles un presente digno. Tal vez incluso, un futuro útil para otros. Yo ya no los quiero ni los odio por lo que fueron; me limito a apreciarlos y mostrarles gratitud por lo que son, por aquello en lo que se han convertido. Dentro y fuera de la literatura; fuera y dentro de mi vida.
Para que el cuento tenga futuro, hay que pasar página. Para avanzar hay que deshacerse del equipaje que nos retrasa. Sin duda son tiempos para el ahorro, pero aun así hay que aprender a tirar lastre: a discernir lo que conviene conservar y lo que no.
En muchas culturas los trastos viejos se arrojan fuera de casa o se queman coincidiendo con el comienzo del nuevo año. Simbolizando de este modo la catarsis de una nueva vida. Os invito a poner en práctica este sano ritual. Nunca es tarde: cualquier momento se revela, en realidad, bueno.


JUBILEO (FINAL DE TRAYECTO)
La mar, insaciable, llama. El astro acude abatido, fingiendo una pasión olvidada. Un día tras otro, el mismo cruel juego. Así hasta el final de los tiempos…
     La penitente mira al horizonte y se ve dentro de algunos años: el cabello prematuramente blanco y demasiadas arrugas para su edad. Comprende que no hay nada más allá: ha llegado a Finisterre, el non plus ultra. Sus pasos, voluntaria o inconscientemente, la han conducido a la Costa de la Muerte.
     El agua está muy fría. A su alrededor flotan objetos cotidianos, restos de otros naufragios. Aterrorizada ante la nueva experiencia que supone nadar en mar abierto, en un acto reflejo, se aferraría a la cama de matrimonio que a duras penas flota… Aunque la sabe podrida por el maltrato y el abandono. Inútil intentar restaurarla.
     Del mar renace una mujer, libre del polvo acumulado en el camino. Entre sus dedos, el viejo certificado se deshace en regueros de tinta. Ella, que no busca venganza sino una nueva vida, consuela su negro llanto.
Salomé Guadalupe Ingelmo

Premio Internacional de Cuento Hiperbreve “F.G.C” 2012



(Jubileo (Final de trayecto), ha sido publicado en Pupilas de unicornio, Antología de los textos premiados en el Premio Internacional de Cuento Hiperhiperbreve “F.G.C” 2012, Los Cuadernos de las Gaviotas número 89, Ediciones Comoartes, Madrid/México D. F. 2012, p. 13)
 


La Libertad guiando al pueblo, Eugène Delacroix (1830)

Para escuchar a Anastacia interpretando Left outside alone

y, por lo premonitorio del documento, en concierto de 2004, en Roma



Los verdaderos protagonistas estan aquí